Esta intervención se enmarca dentro de un proyecto global, que viene desarrollándose en los últimos años, para la conservación del castillo y la reconstrucción de parte de su fortaleza.
20/08/2021, Cáceres.- A través del programa Diputación Desarrolla, financiado al cien por cien con fondos de la Diputación de Cáceres, se han concluido las obras de adecuación e interpretación del recinto exterior del Castillo de Eljas, con un presupuesto de 40.000 euros.
Tal como ha explicado el diputado de Infraestructuras Territoriales Inteligentes y Movilidad, Luis Fernando García Nicolás, esta actuación acometida por la institución provincial se enmarca en un proyecto más global, en el que se viene trabajando en los últimos años, que pretende conservar el castillo y reconstruir en parte la fortificación “para su mejor interpretación y disfrute, a través de distintas actuaciones concretas, reconstructivas y arqueológicas”, recordando que, recientemente se ha intervenido y ha sido consolidada la Torre Cuadrada.
La actuales obras en el recinto exterior del castillo, cuya fortificación podría proceder de época anterior a la musulmana, han consistido en dos actuaciones principales:
– Por un lado, se han proseguido con las actividades arqueológicas, en esta ocasión con la excavación parcial del recinto exterior. Se han retirado la tierra y restos existentes profundizando hasta la roca que sirve de cimentación a todo el castillo, lo que ayudará a comprender el proceso de destrucción y diversos aspectos constructivos de la antigua fortaleza en este espacio defensivo entre ambos recintos, el interior y el exterior entre ambas torres que aún se conservan.
– Por otro lado, se procede a la reconstrucción parcial del lienzo Este, entre las torres Redonda y Cuadrada de la línea defensiva exterior, que ayudará igualmente a la consolidación de la torre Redonda.
La intervención pretende la contención de los terrenos interiores sin afectar a la contemplación de los restos, así como al mismo tiempo facilitar la visita del recinto, todo ello de forma reversible, integrándose, además, la intervención ejecutada en años anteriores.
En todo caso se procede conforme a los criterios de intervención en materia de patrimonio, diferenciando claramente la actual y anteriores intervenciones respecto de los restos históricos existentes. En este sentido se reconstruye parcialmente el volumen del lienzo Este entre ambas torres que se acomete mediante muros y forjados de argamasa de cal armada con acero inoxidable, con acabado abujardado, de forma que, sin competir con los restos, su aspecto resulte integrado con el carácter de la fortificación.
La reconstrucción se plantea de forma que no se impida la visita del antiguo aljibe, que queda integrado en el trazado y será accesible a través de una nueva escalera.
La obra se remata con una barandilla para proteger el desnivel en su lado externo, y otra pieza de cerrajería que protegerá el acceso al citado aljibe.
Un poco de historia
El Castillo de Eljas se encuentra en un promontorio de la población de Eljas, al oeste de Sierra de Gata. El origen de la fortificación podría proceder de épocas anteriores a la musulmana, dada la importancia de la vía de comunicación que controlaba.
Durante la Reconquista aparecen ya referencias a la existencia de una fortificación durante la época en la que Alfonso IX de León reconquista la zona. A comienzos del siglo XIV pasa, por donación real, a la Orden de Alcántara, llegando a ser el castillo sede de una encomienda de la orden a mediados del siguiente siglo, lo que conllevará su ampliación.
A partir de estas fechas comienza un periodo convulso en su devenir. Durante el reinado de Enrique IV se apoderan de la fortaleza los hermanos Centeno procedentes de Ciudad Real, personajes singulares que llegaron a apoderarse de parte del territorio. El rey Enrique encarga al clavero de la orden Alonso de Monroy recuperar la zona, sin llegar a retomar la fortaleza. Finalmente será recuperada, y expulsados los Centeno, en 1488, bajo el reinado de los Reyes Católicos. Se acometen a partir de entonces sucesivas ampliaciones en la fortaleza.
En el contexto de las guerras contra Portugal, los portugueses toman la población y castillo en 1641. Ante los intentos de retomarla por el Duque de Alba, los portugueses deciden abandonarla no sin antes desmantelarla principalmente mediante el incendio y destrucción de lienzos de muralla, quedando a salvo las torres de más difícil destrucción y menor efectividad.
En la visita de la Real Audiencia siglo y medio después se puede constatar el estado ruinoso de la fortaleza.
A mediados del siglo pasado se acometió la ampliación del cementerio municipal que ya ocupaba el recinto defensivo.
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