El presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, ha asistido hoy a la inauguración de la Feria Internacional del Corcho de san Vicente de Alcántara.
También han estado presentes el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara; la delegada del Gobierno, Yolanda García Seco; y el alcalde de San Vicente de Alcántara, Andrés Hernáiz.
Miguel Ángel Gallardo, comenzó dando la enhorabuena al Ayuntamiento por reactivar esta feria. “San Vicente de Alcántara es un ejemplo de economía verde circular; ya cuando el presidente de la Junta de Extremadura habló de este tema, la industria corchera de la localidad había puesto en marcha la sostenibilidad”.
Recordó que la primera industria corchera se instaló a finales del siglo XIX a través de una iniciativa inglesa. Pero los sanvicenteños no quisieron dejar ese producto en manos de otros. Tras destacar que San Vicente es un claro ejemplo de pueblo innovador les animó a seguir apostando por la igualdad introduciendo a la mujer en el mundo del corcho”.
La Feria tiene carácter bianual, pero en 2020 fue suspendida por la pandemia. Hay más de 20 stands y están presentes empresas forestales, fabricantes de maquinaria y de productos químicos.
Guillermo Fernández Vara recordó en su intervención que
“el corcho es uno de los principales valores que tenemos ya que genera empleo y desarrollo y lucha contra la despoblación”. También señaló que Europa, para entregar fondos, exige que el 30% de la inversión esté en proyectos involucrados en la lucha contra el cambio climático. “Nosotros, con ejemplos como el olivar o el corcho, tenemos la etiqueta de sostenibilidad en el escaparate”.
Yolanda García Seco elogió el trabajo que se realiza en San Vicente de Alcántara con el corcho, lo que es un extraordinario esfuerzo, herencia de generación en generación. Habló de la digitalización de esta industria y de la innovación además “de lo importante que es que la gente quiera y pueda quedarse en su pueblo”.
El alcalde Andrés Hernáiz recordó los malos momentos pasados en el sector del corcho por la pandemia. Aunque, considerada industria agroalimentaria y por tanto podía seguir trabajando en los meses más críticos, los clientes estaban con sus negocios cerrados y los pedidos eran mínimos.
Una vez que empezó a superarse esta situación, otros factores como el alza de los precios, el bloqueo de los puertos, la huelga de transportes o la invasión de Ucrania ha venido a dañar a la industria del corcho, “pero el sector está bien y tranquilo”.
FICOR es un encuentro fundamentalmente profesional para el debate sobre el sector corchero y el producto. Pero también habrá en estos días actividades paralelas como talleres, exposiciones o paseo botánico por la dehesa.
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